Sociología

Llueve mientras….

Por: Alexander Cardona*

Desde finales del mes de julio llueve frecuentemente en Bogotá y en 27 departamentos del país, lo que ha generado, inundaciones, desplazamientos, pérdidas materiales y humanas, en la mayoría de nuestra nación.

Si hacemos un análisis objetivo de ésta situación en parte muchos podrían argumentar, entre otras cosas que la naturaleza tiene la última palabra y manda, y puede ser cierto y que probamente nos está pasando la cuenta de cobro por todo lo nocivo, tóxico y devastador que hemos sido con ella.

Es cierto, que al planeta tierra lo seguimos explotando, la seguimos taladrando, sin clemencia, intoxicando, y si a éstos factores le agregamos, la corrupción, la falta apropiada de inversión social en prevención y desarrollo, no pensar en el bien común, y como siempre son los más pobres los que llevan del bulto.

El auge de las enfermedades virales, niños desnutridos, los cultivos perdidos, los terrenos anegados, las vías, el hambre, el desempleo, la adversidad, y el incremento en los artículos de la canasta familiar, hacen el panorama sombrío.

Y como si fuera poco ha de tenerse en cuenta la corrupción de la mayoría de los funcionarios públicos que ejercen su función en pos de sus intereses personales, y eso además de ser un hecho punible, es mezquino, arbitrario y atenta contra al justicia social, y el desarrollo sostenible, el progreso, y la calidad de vida de muchos ciudadanos.

Bueno, pero de cara a esta realidad podríamos hacernos los de la vista gorda, criticar, denunciar, protestar, judicializar a los culpables, o todas las anteriores y además ser solidarios con todos aquellos compatriotas que padecen .

Una de las características de la justicia es: la solidaridad, que no es sólo lástima, burla, sardonismo, ni paliativos, sino, un ataque frontal a la pobreza, el dolor, y todo aquellos que tienen menos, tantos robos continuos y desfalcos a la nación hoy empiezan a notarse, tantas personas sufriendo, y tantas otras viviendo como príncipes con el dinero de los impuestos, dinero de la gran mayoría quienes gana salarios mínimos, del cual salen gran parte de esos impuestos, por ello, es un atropello y un atentado contra los derechos humanos, la dignidad, y el progreso.

Es lamentable ésta realidad y es obvio que hay que tomar medidas sobre este asunto ¿qué hacer? Llueve y mientras en capital, se robaron más de 776 mil millones, vías inconclusas, el carrusel de la contratación, los nexos de los Morenos: El alcalde Mayor de Bogotá y el senador de la república con los Nule, 300 investigaciones, más 16 empresas intervenidas, vías a medio hacer, -es lamentable-.Y obviamente son delitos de los más atroces., trasgresiones a la constitución política y al derecho penal.

Tal vez sin ser fatalista, las cosas cambien, con el tiempo y a veces ciertos signos dejan entrever que hay esperanza, la judicialización de muchos políticos y funcionarios corruptos, hará que las cosas cambien, no al ritmo que quisiéramos pero es un cambio finalmente.

Mientras el ex presidente Uribe hace lobby en otros países preocupado por las demandas ante la corte penal internacional, pidiendo asilo político para la mayoría de sus amigos a quienes les debe, muchos favores, la reelección, y la subida la poder de Santos entre otras cosas.

Lo cierto es que pasa el tiempo y las personas sufren sin clemencia, la explotación laboral, las largas jornadas, el maltrato, y el acoso laboral, lo que genera en la sociedad la injusticia y muchas personas lo saben, y tal vez de alguna manera están anestesiados, y callan, o viven en la indigencia, o en el deseo de hacer dinero rápido, ingenuamente, y creen en muchos de los casos que se pueden salir con la suya, o que no serán juzgados o condenados, olvidando que la justicia es para los de ruana.

Muchos de los que legislan en nuestro país, parlamentarios, senadores, políticos, concejales, conocen la norma y saben que ha de estar la servicio, del bien común , en lugar de seer así está la servicio de los intereses propios y muchos lo saben, y con en la mayoría de los casos no pasa nada, se convierte en el ideal, de o como el imaginario que muchos quisieran seguir, con resultados obviamente distintos.

El anhelo de una sociedad justa y con igualdad de condiciones, con oportunidades para todos, con posibilidades para el progreso, en ciertas ocasiones es una utopía, en la que muchos quieren vivir, pero la realidad es otra, las cosas en muchas ocasiones no son como quisiéramos,

La visa desde muchos puntos de vista se convierte en un concepto ambiguo, para muchos vivir es tener cubiertas sus necesidades primarias, para otros el placer, para muchos el trabajo, para otras, tener casa o apartamento en un buen lugar de la ciudad, poder viajar, acumular, amar y ser amado, ideas, sueños y metas simples en principio pero a la larga no es así.

Y como toma tiempo muchos quieren acelerar ese proceso, y no funciona así, otros creen que un buen comportamiento moral, una buena relación con la divinidad, genera, bienestar, progreso, y es cierto para quienes lo creen.

Muchos se burlan de la sociedad, los padecimientos, y de cómo viven la mayoría producto del robo y la injusticia de muchos, y les vale y no es un objeto de estudio como tal, sino distracción, o un sofisma , o retórica los de siempre se salen con la suya, y pagan los de ruana , así será, así ha sido, y tal vez ha siempre será.

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*Investigador